Al repasar la Historia del Arte, resulta inevitable que ciertas épocas, artistas o movimientos capten de una forma especial nuestra atención. Recuerdo que cuando estudié la carrera todo me parecía fascinante, en algunas ocasiones al cambiar de asignatura pensaba que lo que había visto era lo mejor, pero luego aterrizaba en otra época y seguía fascinándome todo lo que aprendía.
Sin embargo hubo unos artistas que me entusiasmaron de forma especial, por lo diferentes, rompedores y enigmáticos que resultaban, fueron los Prerrafaelitas. Su juventud, espíritu libre e ideales captaron mi atención.
Los victorianos más vanguardistas.
La época victoriana fue muy prospera en muchos sentidos. Durante los 64 años que reinó la reina Victoria I, Gran Bretaña asistió a su cúspide de la Revolución. Una sociedad que avanzó tremendamente en los campos de la Ciencia, Política, Cultura, y que pasó, al inicio de su reinado, de ser un país eminentemente agrícola a serlo plenamente industrializado.
Sin embargo, era una sociedad tremendamente conservadora, y ese aspecto, lejos de cambiar, se afianzo y arraigó mucho más. En respuesta a ello, algunos de los artistas de esa época sintieron la necesidad de revelarse a esa sociedad tan llena de moralismos, disciplina y rígidos prejuicios.
Esos artistas se manifestaron en contra de un arte aburrido, frío, academicista y exento de creatividad. Ellos fueron una minoría pero que caló fuerte en los cimientos de esa comunidad de artistas. Ellos fueron los victorianos más vanguardistas y avanzados que propusieron una nueva forma de entender el arte pictórico.
La Hermandad de los Prerrafaelitas.
Llegados a este momento en la Historia del Arte, algunos artistas consideraban que había que buscar nuevas formulas para avanzar. El arte, que hasta ese momento se había apoyado en los cánones establecidos en el Renacimiento, estaba agotado, ya había dado de sí todo lo posible y era urgente explorar nuevos caminos. El modelo seguido hasta entonces había sido el del gran pintor Rafael de Urbino “Rafael” (1483-1520), pero ya no les resultaba válido, había que buscar un nuevo referente.
Su mirada se dirigió a los pintores anteriores a Rafael, un arte mas natural, espontáneo y centrado más en las emociones que en la técnica.
Con este espíritu nació un nuevo movimiento artístico, cuando tres estudiantes avanzados de la Royal Academy de Londres, se juntaron en 1848 para crear la Pre-Raphaelite Brotherhood (la Hermandad de los Prerrafaelitas). Sus nombres eran William Holman Hunt (1827-1910), Dante Gabrielle Rossetti (1828-1882) y John Everett Millais(1829-1896).
El arte medieval, y en concreto el de los pintores primitivos italianos, pasaría a ser el modelo para sus obras, un arte alejado del amaneramiento académico, un modelo de pureza y libertad.
Ellos fueron los que llevaron a la practica ese movimiento renovador y lo aplicaron a sus obras. Pero lo cierto es que todo ello ya se venía gestando desde hacía tiempo, con los escritos del joven teórico y crítico de arte británico John Ruskin (1819-1900). Ruskin hablaba de la misión ética y moral del arte para con la Sociedad de la época, ensalzaba los valores de la artesanía frente a la creciente industrialización imperante y alababa el poder poético y místico de la Naturaleza.
Pronto empezaron a programarse exposiciones en las que los artistas irrumpieron con sus obras impregnadas de ese espíritu joven e idealista que les movía. Obtuvieron el interés de algunos espectadores y el rechazo de otros por considerar que vanalizaban ciertas temáticas religiosas.
Sus obras entonces comenzaron a inspirarse en las grandes obras de la literatura, Keats, Tennyson y Shakespeare, que les ofrecían temáticas absolutamente inspiradoras que enlazaba sus cuadros con una tradición cultural muy arraigada y a la vez les hacía partícipes de ciertos temas contemporáneos de dimensión social. Ello les llevó a conseguir por fin la aceptación y el reconocimiento de los críticos del momento.
La obra “Ophelia” de John Everett Millais significó un ejemplo total de lo que un cuadro prerrafaelita debía ser, en cuanto a temática, simbolismo, exaltación de la Naturaleza, poética e incluso en la forma de utilizar los colores. Desde el momento que esta obra vio la luz (1852), fue alabada por un público abierto a nuevas expectativas y con ganas de contemplar un arte diferente. La Ophelia de Hamlet abría un camino que muchos otros iban a seguir.
La segunda generación.
La Hermandad de los Prerrafaelitas, había conseguido su objetivo, pero duró poco tiempo. Pronto cada uno de los integrantes siguió su propio camino. A partir de noviembre de 1853, Rossetti escribía a su hermana: “La Mesa Redonda está ahora totalmente disuelta”.
Sin embargo eso no supuso un impedimento para que aquello que ellos habían iniciado arraigara profundamente y pronto empezaron a surgir artistas que siguieron el camino que ellos habían trazado.
Aparecía así la segunda generación de prerrafaelitas, encabezada por Edward Burne-Jones (1833-1898) y William Morris (1834-1896) más presente en las artes decorativas y más tarde impulsor del movimiento “Arts & Craft” (movimiento basado en el interés por el dibujo y la artesanía medievales).
Esta segunda generación abandonaron un tanto la tendencia medieval para inclinarse más hacia artistas italianos, en concreto hacia Sandro Botticelli.
El movimiento irradió su influencia hasta finales del siglo XIX y pintores como John William Waterhouse (1849-1917), adoptaron las ideas de los victorianos más vanguardistas llevándolas hasta las últimas consecuencias, como puede apreciarse en su obra “The lady of Shalott” (1888).
El arte siempre avanza porque surgen espíritus libres que se revelan ante lo establecido. Ellos se erigieron en los rompedores de las reglas y dieron un nuevo aire a un arte enrarecido que ya nada podía ofrecer al público que lo contemplaba.
“El alma de la belleza”
Bajo el arco de la Vida, donde el amor y la muerte,
El terror y el misterio, guardan su santuario,
Yo vi a la Belleza en un trono,
Y aunque sus ojos son abandono
La dibujé en la simplicidad de mi aliento.
De Ella es la mirada ─sobre y debajo
Del cielo que se curva sobre ti-
Por mar o cielo o mujer, sólo hay una ley,
Ser el siervo de su palma y su corona.
Esto es lo que la Señora de la Belleza sabe,
En cuya alabanza tu voz y tu mano se agitan,
Larga sabiduría en el vuelo de tu cabello,
El diario palpitar en tu corazón y tus pies,
¡Con qué pasión irremediable, en cuántos vuelos!
¡Cuántas formas y maneras tienen sus días!
Dante Gabriel Rossetti, 1866
Mey González dice
¡Hola!
Este post para mi es muy informativo, no conozco nada de arte, siendo muy sincera por ende no conocía acerca de los prerrafaelitas, me han gustado mucho las fotos de las pinturas que colocaste ya que ejemplifica lo que nos quieres contar, he aprendido mucho acerca de esta hermandad.
Saludos
manifiestodearte dice
Gracias Mey,
Me alegran tus palabras y que esta entrada del blog haya servido para ampliar tus conocimientos en Arte, así que encantada de tenerte por aquí.
Un saludo.
lala tur dice
Holaa,
Qué pasada, estoy muy poco puesta en arte y con este tipo de post más me doy cuenta. Me he quedado fascinada con alguno de ellos ya que parecen una fotografía. Yo soy muy amante de la naturaleza así que estos cuadros me han gustado mucho. Me ha impactado especialmente el de “La muerde de Ofelia” por la cantidad del detalle de la pintura. Espectacular!
manifiestodearte dice
Gracias Lala,
La verdad es que fue un grupo muy peculiar, uno puede imaginar cómo vivieron y lo inmersos que estuvieron en la Edad Media, vivieron muy intensamente esa época incluso se vestían un poco como los hombres de ese momento.
La verdad es que fueron un poco “frikis”, pero a la vez se hicieron muy populares.
Un abrazo.
Rita Gallech dice
Holi! muy interesante el post que nos traes, no conocía tan a profundidad a los Prerrafaelitas. Así mismo de arte conozco lo básico pero como se nota cuando a uno le gusta un tema, has plasmado muy bien las características, se nota que es tu pasión.
Por muchos más post informativos llenos de sabiduría como el que nos has mostrado
🙂 bisous
manifiestodearte dice
Gracias Rita,
Eres muy amable. La verdad es que haga lo que haga, mientras sea relacionado con Arte, le pongo mucha pasión.
En este tipo de entradas tampoco se trata de profundizar excesivamente porque sería tedioso para mucha gente, pero sí dar una breve pincelada para ampliar conocimientos.
Besos.
Marah dice
Hola!!! Sin duda me encanta el arte, no sé mucho sobre ello la verdad pero me encanta admirar la belleza de obras que podemos encontrar por el mundo y La Hermandad de los Prerrafaelitas es una de ellas, me encantó como ilustras el post y la información es perfecta, sobre todo para personas como yo que no la conocíamos.
manifiestodearte dice
Gracias Marah,
Eso significa que tienes sensibilidad para apreciar el Arte, y aprecias la belleza que hay en estas obras.
Me alegro de que te haya ilustrado al menos un poquito en este tema y de que estés por aquí.
Un abrazo.
Paulina dice
¡Qué artículo más interesante! La verdad no conocía nada acerca los Prerrafaelitas. Soy una adicionada del arte, así que me gusta leer artículos tan detallados y escritos por profesionales. Gracias por presentarme a estos artistas, los que rompen con estructuras sociales rígidas y se revelan con paradigmas establecidos son mis preferidos 🙂
manifiestodearte dice
Bien Paulina ¡¡¡¡
Esos también son mis preferidos, hahaha.
Los transgresores, vanguardistas y rompedores, porque sin esta gente el mundo no avanza. Ellos son los que hacen que merezca la pena estudiar la evolución del Arte.
Gracias por tus sinceras palabras.
Besos
Loreto dice
Conocía alguno delos cuadros que nos presentas, pero desconocía la historia que había detrás. Me gusta conocer los orígenes, el por qué un artista hace lo que hace, o como en este caso, por que surge una tendencia artística, en que momento y bajo que circunstancias.
Como movimiento artístico, la Hermandad de los Prerafaelistas, me parecen fascinantes. No tan solo por los motivos por los que surgieron, es que su estilo me parece bellísimo. Los motivos escogidos, la forma de utilizar los colores y las texturas, resultan muy frescos, sobre todo teniendo en cuenta la época.
“La Ghirlandata” de Dante Gabrielle Rossetti, “La muerte de Ofelia” de John Everett Millais y “The Beguilling of Merlin” (Leyendas arturicas” de Edward Burnes Jones me parecen tres pinturas deliciosas.
Tengo que darte las gracias, porque en cada post nuevo nos acercas un poco al arte, y nos haces disfrutar.
manifiestodearte dice
Eres un amor Loreto !!!
Tú sí que me animas a seguir adelante con este blog.
Tu sensibilidad artística y creativa hace que puedas apreciar lo que hay detrás de una obra de arte.
Me alegro de que estés aquí para comentar mis entradas y disfrutar con ellas.
Seguimos en contacto.
Un abrazo.
Covadonga Jaquete dice
Hola Lourdes.
Acabo de encontrarme con tu blog y me parece interesantísimo. Soy aficionada al arte por mi profesión de diseñadora de estampados para moda y decoración.
Me ha chiflado esta entrada de los Prerrafaelitas, los conocía pero no con tanto detalle y no sabía que formaba parte de este grupo William Morris, al que admiro y emulo en alguno de mis estampados.
Estoy encantada de haberte encontrado y buscaré tiempo para ver todo lo publicado hasta ahora.
Un saludo y gracias por tu dedicación a algo tan maravilloso.
manifiestodearte dice
Hola Covadonga !!
Agradezco muchísimo tus palabras y me hace feliz saber que estas encantada con el blog y de que hayas conocido cosas nuevas acerca de William Morris. Tu profesión me parece también muy apasionante y donde la creatividad es fundamental. Te encantará también mi entrada de Jessie Arms, ella también estaba vinculada a tu profesión. Espero seguir recibiendo tus comentarios, seguro que nos aportarán mucho a todos los lectores. Un abrazo Covadonga !!